Presupuesto tras presupuesto la Generalitat Valenciana olvida en el fondo del armario de sus cuentas públicas la dotación necesaria para finalizar la Vía Verde, vía que transcurre por el antiguo recorrido ferroviario minero y que conectaba las minas de hierro de Ojos Negros con el embarcadero de El Puerto. Ni siquiera para el próximo 2023 veremos la asignación para poder realizar el proyecto necesario.
Esta historia interminable -ya 20 años desde que se inició- de la conversión de la antigua Vía Minera en Vía Verde no acabará en donde le corresponde por historia y sentido común, a escasos metros de la playa de El Puerto, donde se encontraba el punto kilométrico 204 del antiguo trazado, que la convertía en la vía minera más larga de Europa. No, en su lugar, el Gobern del Botànic, integrado por los mismos partidos que el Gobierno Municipal de Sagunto, ha decidido, o mejor dicho decidió hace años que no merecía la pena ese pequeño esfuerzo presupuestario y que era mejor desviar el trazado hacia el sur para conectar con la vía Xurra que sale de Valencia. Proyecto, por cierto, que adolece del más mínimo rigor histórico, pues salvo el túnel de Albalat dels Tarongers el resto del trazado se aleja tremendamente del trazado original (destruido en buena parte por la autovía Múdejar) sin un puente cicloturista de nueva factura que cruce la AP-7 (lo cruza por el puente de la CV-314 Petrés-Sagunto) y buscando el camí de Lliria para salir a Puzol a enlazar con la Vía Xurra, en un trazado también alejadísimo de esta vía.
De nada sirven los diversos pronunciamientos en el Pleno Municipal reclamando esta infraestructura -el último el pasado mes de septiembre- si caen una y otra vez en saco roto. Es evidente el desinterés por esto, no sólo en Valencia, si no, y esto es lo grave, del poder residente en Sagunto, que más que venirle grande el Patrimonio Industrial, lo desprecia por no considerarlo digno del milenario patrimonio saguntino, sin la entidad que acreditan sus vetustas piedras: Y evidentemente porque dignificar y poner en valor la historia minero-siderúrgica es acrecentar la identidad de un pueblo, El Puerto, y por ahí no están dispuestos a pasar.
Darío Moreno lo tiene muy claro, con levantar el brazo a favor de estas iniciativas en el Pleno, ya ha cumplido, pero no va a mover un dedo para que el Patrimonio Industrial se realce, se engrandezca y se ponga en valor, no va a ser que los de El Puerto le coman la tostada.
Así vemos como 50 años desde el desmantelamiento de la Vía Minera y casi 40 años tras el cierre de la siderúrgica, el Patrimonio Industrial no sólo no se ha puesto en valor en su conjunto, sino que ha ido mermando, con un Museo Industrial y una Nave de Talleres que no ven el final, un Pantalán irremediablemente perdido cayéndose a pedazos, esperando su parcial resurrección, y con una Gerencia pendiente de rehabilitar que se nos cae a trozos.
Y el Horno Alto cerrado.
Sergio Paz Compañ
Iniciativa Porteña
