EL PASOTISMO PORTEÑO – Sergio Paz (Junta Directiva de IP)

 

_____

    El diccionario define pasotismo como la actitud propia del pasota, es decir, aquel que se muestra indiferente ante cuestiones que importan o se debaten en la vida social. En la cultura valenciana la palabra más arraigada para definir esta condición es  «meninfotisme», es decir, desinterés por todo o no querer saber nada de las cosas que deberían interesar o preocupar.

            Por desgracia esta parece ser la actitud que ha calado de manera bastante profunda en buena parte de la sociedad porteña. Aunque más bien diría que es la forma en que el poder político lleva décadas moldeando a la ciudadanía porteña. A base de crear un discurso (hasta llegar a aburrir a todos) basado en promesas que nunca llegan, y si lo hacen demasiado tarde y a destiempo, a base de dejar languidecer las cosas para que se caigan de puro viejas, a base de acostumbrarnos a vivir entre inmundicias y hacernos creer que la culpa es nuestra, han conseguido su objetivo, tener una sociedad anestesiada e indiferente.

            Y si creen que exagero sólo tienen que darse una vuelta por el pueblo (más bien ciudad a tenor del número de habitantes) y echar mano de hemeroteca. Porque aquí parece que no pasa nada porque el tren de Cercanías no sea una realidad a pesar de su ridículo coste, o que el Horno Alto este cerrado y deteriorándose ni se sabe ya cuantos años, al igual que la Nave de Talleres, o que la Gerencia tras más de 7 años de titularidad pública siga en ruinas, o que la promesa de convertir El Economato en Centro de Atención a Mayores, siga sin fecha, o que el Pantalán se haya caído por falta de mantenimiento, o que se haga un centro de interpretación de la Vía Verde en la playa (sic) sin que la Generalitat tenga la más mínima intención de finalizarla en El Puerto, o que la falta de limpieza viaria y mantenimiento de jardines sea un clamor, o que las inundaciones sea un hecho recurrente cada vez que caen cuatro gotas, o que nuestros alumnos de secundaría tengan que ir a barracones y fuera del casco urbano porque no se acaba el nuevo instituto reclamado durante años. Por no hablar de la discriminación sistemática del reparto de la inversión presupuestaria, deportiva o cultural que nos brinda el ayuntamiento de Sagunto, origen de buena parte de nuestras deficiencias.

            ¡Qué distinto es este Puerto a aquel por el que tanto lucharon nuestros reivindicativos padres y abuelos! Un pueblo forjado por el aluvión de emigrantes venidos de toda España al calor del trabajo en la industria minero-siderúrgica, enriquecida durante las últimas décadas por el aporte de una multitud de extranjeros que se han integrado perfectamente en él; porque aquí nadie es forastero, de hecho esta palabra no existe en nuestro vocabulario.

            ¿Qué nos ha pasado? ¿Por qué no reaccionan los porteños? La explicación que encuentro a esto es que sencillamente el pasotismo se ha instalado entre nosotros y ha enraizado con fuerza. Lo ha hecho desde un adormecimiento social fomentado desde la clase dirigente y por la ideologización simplista tan arraigada entre los porteños, que sólo se mueven si es el contrario y no el propio, el que hace mal las cosas.

            ¿Qué esperan los porteños para convertir la calle en un clamor? Parece que sólo nos movemos cuando nos tocan bien tocadas las narices (acuérdense de Calero y su intento de eliminar el topónimo) o cuando nos meten mano a la cartera intentando cerrar nuestras industrias. Pues bien, esa larga lista antes enumeraba es una forma sutil y continua de saquearnos la cartera y despreciar nuestra identidad.

            No hay otra salida que nosotros mismos administremos lo que es nuestro, que esta ciudad tenga su propio ayuntamiento y se administre conforme a sus capacidades y necesidades. Así se reafirmará nuestra conciencia como pueblo y el pasotismo pasará a la historia, porque los pueblos que tienen conciencia de serlo no siente desinterés por las cosas que de verdad importan.

Sergio Paz Compañ

Junta Directiva Iniciativa Porteña

Facebook
Twitter
LinkedIn

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *