La playa de El Puerto casi ha recuperado su imagen previa a las tormentas de finales de agosto. La pena es que la temporada de playas prácticamente ha llegado a su conclusión sin la debida normalidad. Está claro que el Ayuntamiento de Sagunto no asume que nuestra playa tiene un potencial turístico de primera categoría, si no, no se explica la lentitud en la reparación de los daños.
Un recurso fácil para contrastar la capacidad de solucionar problemas del ayuntamiento de Sagunto es la comparación con nuestros vecinos de Canet para explicar lo que es la agilidad en la resolución de problemas. Canet en tan solo 24 horas ya tenía el paseo marítimo transitable, mientras en El Puerto ha estado cerrada la parte sur durante dos semanas. Nuestra playa sigue precintada en una buena extensión junto al pantalán, mientras que la playa turística de Canet ya estaba utilizable en toda su extensión en apenas tres días desde la tormenta.
Buena parte del desastre vino provocada por la falta de previsión ante el aviso de lluvias fuertes, lo que condicionó una actuación chapucera y a destiempo en el canal de la Lonja. El aspecto de nuestra playa en la primera quincena de septiembre ha sido de dejadez, puesto que algunos días ni siquiera se veía a personal trabajando. Puedo entender que los daños han sido cuantiosos, pero la imagen que percibimos los ciudadanos es de abandono.
Quizá al señor Rovira le preocupa más el anidamiento del chorlitejo patinegro en las playas del norte del municipio, o fotografiar chicharras por las calles de El Puerto. Ambos asuntos indudablemente pueden tener cabida en su agenda, pero antes por orden de prioridad, debería centrarse en su servicio a los ciudadanos y en la atención adecuada a las delegaciones que ostenta, la de playas y la empresa municipal de limpieza (SAG), de la cual ya les hablaré otro día.
Atentamente
Manuel González Sánchez
Portavoz de IP, grupo político más votado en El Puerto