Estos días se ha comentado el estado de abandono del cementerio de El Puerto, algo que es extensivo a otras zonas concretas de nuestro pueblo, como la entrada al teatro de Begoña o el alto horno. Pero también, esa sensación de suciedad es extensiva al resto del municipio. La solución puede resultar compleja, aunque es difícilmente explicable que una empresa como la SAG con 350 trabajadores y un presupuesto de 14 millones de euros, no resulta suficiente para tener nuestras calles y lugares de interés en perfecto estado de limpieza.
El alcalde de Sagunto como es evidente y hasta cansino, utiliza casi todo el tiempo en vender su imagen, bien sea fotografiándose con niños pequeños, explicando como limpian el monte nuestros equipos forestales, acudiendo a eventos, en algunos casos no demasiado importantes o vendiendo las campañas municipales en favor del cuidado de los nidos de murciélagos y golondrinas. Cuestiones todas ellas con un cierto grado de importancia, pero que suponen ocupar un tiempo que es muy relevante a la hora de organizar un equipo de trabajo como lo es el gobierno municipal. A Darío Moreno no se le pagan 54000 euros anuales para dedicarlos al autobombo, pues él es el encargado de coordinar las delegaciones de un equipo que entre asesores y concejales cuenta con 19 personas a jornada completa.
Pues bien, que no me quiero ir del tema, el señor alcalde, en uno de esos programas que utiliza para vender su imagen, concretamente en una emisora local, ante las preguntas que hablaban de la suciedad del municipio, se explayó echándole la culpa al concejal de EU que lleva la SAG y también a la oposición, culpándonos de no haberle dejado cambiar el gerente de la empresa de limpieza.
Esa es a pobre conclusión de Darío Moreno, esa es la forma en la que se lava las manos el principal responsable del funcionamiento de cada una de las delegaciones. Quiere justificar su incompetencia manifiesta en el malfuncionamiento de la SAG, en que la culpa de todo es del gerente. Sabe muy bien el primer munícipe, que, en cualquier caso, la primera decisión que debería tomar es al 100% política y en ese terreno solo puede actuar en un sentido, dada su pérdida de confianza, con el cese del delegado de la SAG. Pero su ceguera política, le lleva a saltarse al delegado que él mismo eligió para ese puesto y suplantar sus funciones proponiendo cesar al gerente de la SAG.
Darío Moreno habla de deslealtad de EU, pero el que ha traicionado de manera manifiesta a sus socios de gobierno, indudablemente ha sido él, además intentando utilizar en su favor a un consejero de otro partido que ya había sido cesado. Esta manera de actuar es difícilmente explicable, pero reducir el problema de la SAG al cambio de gerente, oculta otros intereses que con el tiempo saldrán a la luz.
El pasado año le pedí al señor alcalde que me cediera la gestión de la empresa municipal de limpieza. En esto de la gestión pública hay dos vertientes, la política y evidentemente la vertiente técnica. Veo que hay cierto desencuentro entre ambas o más bien llevan trayectorias divergentes, algo que en una delegación como la SAG es inadmisible. Estoy convencido de que lo que está fallando es la línea política, pero ojo, no solo de su delegado, sino también del presidente del consejo de la empresa que como bien saben es el mismísimo alcalde de Sagunto. Otra legislatura perdida…
Atentamente:
Manuel González Sánchez
Portavoz del Partido Político mas votado en El Puerto