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El concejal Juan Guillén destaca el peligro de no tener instaladas las torres de vigilancia
Hace escasos días se iniciaba la temporada de playas, anunciada a bombo y platillo por el concejal delegado en rueda de prensa enumerando entre otras las medidas relativas a la seguridad que se iban a implementar.
Pues bien la primera en la frente, resulta que una de las principales medidas destinadas a velar por la seguridad de todos los bañistas no estaba instalada el primer día de la temporada. Me estoy refiriendo a las torres de vigilancia, que sirven de atalaya para que los socorristas avisten de forma inmediata cualquier incidente, y eviten males mayores. Se da la circunstancia además que nuestra playa tiene un punto de especial relevancia en cuanto a seguridad se trata, ya que todos los años nos da algún susto que otro, y todo tipo de medida de seguridad no es poca cuando de la seguridad de las personas se trata.
Pero es que además las torres servían para colocar las banderas que señalan el estado del mar para que la gente pueda saber los peligros existentes, incluso la prohibición de meterse en el agua en caso de bandera roja. Actualmente esta señalización se hace en un único lugar lo que hace realmente difícil que se vea esa bandera desde todos los puntos de la playa, con el peligro añadido que la falta de información o deficiente información conlleva.
Si bien es cierto que la temporada de playas se ha adelantado este año 15 días no es menos cierto que el equipo de gobierno ha tenido todo el invierno para prever esta eventualidad y que todo estuviera en orden desde el primer día. Podría alegarse que en Semana Santa también tenemos servicio de socorrismo sin torres de vigilancia pero es evidente que el número de personas que visitan la playa en esa época es muchísimo menor, y todavía menos los que se meten en el agua, por lo que una simple vigilancia a pie de arena es más que suficiente.
No podrá alegar el equipo de gobierno falta de tiempo, ya que han tenido todo el año para hacer esta gestión que a la vista está ha sido totalmente ineficaz. Llegados a este punto sugerimos al equipo de gobierno que instale torres de vigilancia provisionales, de forma que en un lapso breve de tiempo dispongamos de esta instalación de seguridad.
Continúa el edil porteño detallando otras deficiencias detectadas
Siendo la falta de torres de vigilancia la principal deficiencia, también llama la atención la falta de agua en los lavapiés. Hemos intentado sin éxito averiguar de fuentes del equipo de gobierno el por qué de esta falta, pero nada nos han respondido. Si se trata de alguna medida de protección contra el COVID, deberían haber informado debidamente en los propios lavapiés. Aunque de todas formas existen medidas para evitar que la gente toque con sus manos la botonera como hemos podido observar en otros lugares. Bastaría con colocar una célula detectora, de forma que al meter el pie debajo del grifo se acciona el dispositivo y sale agua, como en tantos y tantos sitios existe en los lavabos públicos por ejemplo. Pero claro para eso hace falta imaginación y ganas de trabajar. En cualquier caso pasamos esta sugerencia al equipo de gobierno.
El concejal segregacionista denuncia el afán por las fotos descuidando la gestión de asuntos importantes
De un tiempo a esta parte venimos observando el afán casi obsesivo por el alcalde y todo el equipo de gobierno por “aparecer” en las fotos. Ya he comentado anteriormente la rueda de prensa realizada por el concejal de EU, responsable, es un decir de playas, anunciando el inicio de la temporada. Pero es que apenas hace 9 días el alcalde de Sagunto estuvo en la feria de turismo FITUR, en Madrid, en teoría para promocionar nuestras playas, que a la vista está todavía presentan algunas deficiencias. No tenemos nada en contra de que el alcalde se haga cuantas fotos quiera, pero antes debe dejar los deberes hechos.