Desde hace ya una semana tengo en la cabeza unas palabras que fueron pronunciadas en un pleno telemático, y son las siguientes: “nacionalismo local, rancio y anticuado.” No me ha hecho falta buscar si frase era la correcta debido a que la tengo grabada a fuego en mi mente.
Pues bien, estas palabras fueron pronunciadas por el señor alcalde durante la celebración del pleno de debate sobre el estado del municipio en una clara respuesta a la contundente intervención del portavoz de Iniciativa Porteña, Manuel González.
Me gustaría tratar varios asuntos sobre todo lo que gira en torno a esta frase tan desafortunada como errónea. Mire señor alcalde, Iniciativa Porteña son más de 25 años de lucha incansable de una población descontenta por la situación que vive durante muchos años. Es más, como me dijo una vez un gran socio de nuestras filas: “Iniciativa Porteña son más de 100 años porque ya se empezaron movimientos segregacionistas desde 1927 con la Unión Urbana”.
Por ello, me gustaría poner en valor el trabajo que se realiza desde Iniciativa Porteña. Por supuesto no desvelaré todo aquello que está por venir y me centraré simple y llanamente en el recorrido que hemos realizado. Tenemos la gran fortuna de ser la organización más cercana a la ciudadanía con continuas reuniones vecinales que nos muestran una y otra vez la gran defensa que tenemos, no solo de la organización, también de nuestro pueblo, El Puerto.
Tal vez será porque El Puerto vio crecer a las personas que hoy en día conforman Iniciativa Porteña, y es por ello que todavía no entienden como han tenido la osadía de comprar la casa de Romeu, por poner un ejemplo al azar, aunque tengo otros que me reservaré para futuros escritos, mientras dejan de lado infraestructuras idénticas como la casa Noguera o la casa Amarilla o casa Aznar. Y me resulta curioso que todo lo que tiene relación con El Puerto y que se debe llevar a cabo siempre tiene algún problema, siempre surgen problemas técnicos, de contratos, de burocracia, etc. Pero el único problema que hay son las ganas para acometer acciones por el bien de El Puerto. Bendita casualidad que todos los problemas se encuentran en El Puerto.
Con todo esto y tras ver sus antecedentes, me resulta muy difícil creer que vayan a realizar algo por el patrimonio industrial, porque sinceramente creo que no les importa nada porque no aprecian ni conocen lo que es El Puerto. Por el contrario, hay muchas personas para las que El Puerto es más que un simple pueblo, es un símbolo y un sentimiento que llevan dentro de ellos mismos, que lo quieren como si de un familiar se tratara, y es a ellos a los que me debo y a los que defiendo porque comparto plenamente la pasión que desprenden.
Señor alcalde, no se equivoque porque no somos nacionalistas, somos segregacionistas. Y no estamos anticuados, estamos más vivos de los que a muchas personas les gustaría, así que tenga muy en cuenta a Iniciativa Porteña.
Eduardo Márquez Fuertes
Presidente de Iniciativa Porteña