El Ribarroja venció como local a un Acero que solo ha conquistado cuatro puntos de los últimos 18 que ha disputado. Los anfitriones sacaron el máximo partido a sus oportunidades de marcar y lograron dos tantos. Los visitantes, por su parte, propusieron el juego, incluso llegaron a acosar mediante el mismo a su oponente, pero no acabaron de manifestarlo con goles. El partido estuvo marcado por una discutida, por ambos bandos, permisividad arbitral.

El Acero de Dani García viene desarrollando durante toda la temporada un fútbol valiente y serio y así se mostró en el Municipal de Ribarroja desde el primer minuto. El juego de los de El Puerto se quedó en el centro del campo y durante la primera media hora de partido no se vivieron ocasiones claras por parte de ninguno de los dos equipos. A la media hora los visitantes reclamaron un penalti en área de Jordi, pero no fue señálado, y Cuando parecía que el primer acto acabaría en nada, marcaron los locales, a cinco minutos del descanso. Fue Cifo el autor del gol, tras cazar un rechace con la mano de la zaga acerista a tiro de Rivera. Tres minutos más tarde serían los locales los que pidieran la pena máxima por una falta sobre Pomer.

Ya en la segunda mitad el Acero se volcó y su dominio fue casi total, encerró al Ribarroja y si Richi no llega a intentar adornarse en un remate, desesperando incluso a su técnico, hubiera llegado la igualada. El primer cuarto de hora fue para los porteños y el Ribarroja se fue sintiendo mejor en defensa conforme pasaban los minutos. En el 72′ Pomer marcó el segundo local, fue un señor gol, quitándose de encima a varios contrarios, que hizo que su público se pusiera en pie. Luego, Cifo intentó el tercero a balón parado y en boca de gol, pero Sergio estuvo fino bajo palos. En la recta final del partido se palpaba más el 3-0 que el 2-1. Los tres puntos se quedaron en Ribarroja, cuyo equipo suma dos victorias consecutivas, aunque el Acero hizo méritos para llevarse alguno de vuelta a casa.

Tras este resultado la clasificación queda así: