La historia, la geografía, la economía, la política, las costumbres y tradiciones… etc, configuran la identidad, la cultura de un pueblo. Y la realidad es que El Puerto,  se ha hecho a si mismo como pueblo, con gentes que tienen  su particular forma de ser  y existir. De hecho, desde temprana edad, la mayoría de los ciudadanos de este pueblo, nos identificamos como “porteños”. Es importante que mantengamos nuestra identidad,  que sepamos valorar quienes somos y, para ello, es necesario que los habitantes de este pueblo, sean conscientes de porque nació y como se forjó lo que hoy conocemos como El Puerto.

Si nuestra comunidad quiere alcanzar algún día su independencia Municipal, tenemos que echar el resto para defender nuestra identidad de aquellos, que son conscientes de que acabando con ella, acaban con El Puerto como pueblo.

El Puerto,nuestro pueblo, es un pueblo con su propia realidad, que ha intentado conseguir su propio Ayuntamiento, hasta en cinco ocasiones:

En 1927 se produjo el primer intento. En Plena Guerra Civil, se aprobó iniciar los trámites, e incluso la realización de un Referéndum que pasó a mejor vida con los bombardeos sobre la población y el posterior desarrollo de la contienda.En 1952 hubo un nuevo intento que también fracasó. Esa inquietud siempre ha estado presente entre nosotros, hasta que llegaron el cuarto y  el quinto intento, todavía en marcha y que ha promovido Iniciativa Porteña.

Es decir, que el deseo de que El Puerto se convirtiera en Municipio Independiente, ha permanecido en el fuero interno de muchísimos ciudadanos de nuestro pueblo, que ha ido creciendo con el paso de los años. Conscientes de que acabando con nuestra Identidad, acabarán con nuestros afanes de independencia, los grandes partidos, intentan una y otra vez torpedear todo aquello en torno a lo que nos identificamos. Y desde luego, que sobre todas las cuestiones, destaca el nombre o topónimo de nuestro pueblo.

Hace dos legislaturas, cuando gobernaba el tripartito, se intentó acabar con el topónimo de El Puerto, y ello generó una reacción sin precedentes, puesto que a los porteños, nos habían tocado nuestro “yo”, nuestro corazón. Aunque  el tripartito corrigió, pagó muy caro su intento de acabar con el nombre de nuestro pueblo. Pero lo que queda claro es que aquello fue un primer intento que dio sus frutos, puesto que desde las instituciones Autonómicas y Nacionales, aquel acto abrió las puertas para que en todas sus comunicaciones obviaran el topónimo de El Puerto. A pesar de la reacción del pueblo, el primer paso tuvo sus primeros efectos.

Desde Segregación Porteña, éramos conscientes de que en el momento en el que El Puerto se relajara, volverían a intentar romper nuestras señas y así ha sido. Los tremendos efectos de la crisis por la que atraviesa el País, han provocado también que la preocupación de los ciudadanos en general, esté centrada de modo natural, en el empleo, la vivienda y los enormes problemas que existen en este momento. Estas preocupaciones por las cuestiones de primera necesidad, han provocado esa relajación en la vigilancia de nuestras señas de identidad, que ahora algunos aprovechan para iniciar un nuevo asedio contra el nombre de nuestro pueblo.

La Generalitat Valenciana, ha dictaminado en contra del Expediente de Segregación. Para ello se han basado en informes que evidencian que no les agrada demasiado, que nuestro pueblo tenga una identidad diferenciada que le hace acreedor a tener su propio Ayuntamiento. En uno de esos informes, desde el Consell Juridic Consultiú, en sus apenas diez páginas, denominan a nuestro pueblo como el “BARRIO DE PUERTO DE SAGUNTO” hasta en 24 ocasiones. Ese informe, decisivo para dictaminar en contra de la segregación, está lleno de menosprecio y maltrato, ya no solo al expediente, sino también a todos los que vivimos en El Puerto.

Ha comenzado una nueva batalla por defender nuestra identidad. Somos un pueblo por desgracia acostumbrado a luchar por su supervivencia. Hemos luchado desde nuestro nacimiento, por el trabajo, por los derechos sociales, por la democracia, en definitiva, con nuestra capacidad de lucha y autodeterminación, nos hemos hecho a nosotros mismos. Somos un pueblo muy fuerte, sobretodo cuando nos unimos por una causa común. Y ahora mismo, se hace necesaria esa unión, porque nuevamente intentan acabar con nuestra existencia  y con el Topónimo que con tanto orgullo llevamos en nuestro corazón. Los porteños tenemos que decidir si queremos ser pueblo o, si por el contrario, nos conformamos con que nos consideren un Barrio de Sagunto. Segregación Porteña presentará diferentes iniciativas para que el Consell corrija esta situación. Contamos con vuestro apoyo.

Atentamente:

Manuel González Sánchez

Portavoz de SP en el Ayuntamiento.